Un dispositivo desarrollado en Argentina es capaz de automatizar las sillas de ruedas comunes. Se trata de un sistema provisto de dos motores, que puede ser controlado a través de una aplicación de software llamada ImpulsAR.

Esta novedad tecnológica facilita el transporte intra y extrahospitalario de pacientes con lesiones, discapacidades y limitaciones de movimiento de todo tipo, y sería de gran ayuda para el desempeño de las labores de las y los profesionales de la enfermería. 

El desarrollo fue presentado recientemente en la Bienal Internacional de la Industria Eléctrica, Electrónica y Luminotécnica Biel Light Building, donde destacó por su capacidad de adaptarse a cualquier tipo de sillas de ruedas, para transformarla a un precio económico y de manera sencilla.

Así fue reseñado en la página web de la Universidad de San Martín (UNSAM), donde Tomás Debeliuch, creador del dispositivo y de la app, cursa estudios avanzados de Ingeniería Industrial en el Instituto de Calidad Industrial.

De acuerdo con la información compartida por la UNSAM, Debeliuch decidió realizar el dispositivo para ofrecer una solución ante los altos costos de las sillas motorizadas que, en muchos casos, limitan su acceso.

“Una silla de ruedas motorizada no es de fácil acceso, incluso es un bien de lujo. Las más económicas están entre los 120 y los 160 mil pesos. Mi idea es acercar un producto más económico a la gente, porque cuesta menos de la mitad y es de mejor calidad y mucho más liviano”, relató Debeliuch.

Además, se refirió al tema de los repuestos y precisó: “la mayoría de las sillas de ruedas motorizadas se importan de China. Si se rompen, los repuestos son carísimos —un motor puede valer casi la mitad del valor de la silla— e incluso, en ocasiones, hay que mandar la silla de nuevo a China para repararla. En cambio, nuestros dispositivos pueden arreglarse en nuestro taller a un costo mucho menor y con garantía nacional”.

El sistema desarrollado por Debeliuch es liviano y portable, lo que también resulta un factor favorable al considerar el momento de trasladar o guardar la silla de ruedas, considerando que una silla motorizada esa al rededor de 60 kilos, mientras que una tradicional equipada con el nuevo dispositivo pesa unos 12 kilos, además de ser plegable.