Loading...

Información, datos y testimonios de calidad formativa para tu crecimiento

Da tu primer paso hacia nuevos conocimientos. Cursos 100% online para profesionales de la salud.

ACTUALIDAD

¿Pueden las enfermedades cardíacas desencadenar trastorno por estrés postraumático?

Se conmemora el Día del Trastorno por Estrés Postraumático. La fecha sirve para visibilizar este padecimiento, frecuentemente subdiagnosticado. Los eventos cardiovasculares agudos son desencadenantes a tener en cuenta en la práctica clínica diaria.

Imagen del articulo

Los aspectos más relevantes del artículo

  • Se conmemora el Día del Trastorno por Estrés Postraumático.
  • El denominado trauma cardíaco es otro de los desencadenantes a tener aquí en cuenta.
  • En pacientes con antecedentes de eventos coronarios agudos recomiendan diagnosticar y tratar dicho trastorno.

Se conmemora el Día del Trastorno por Estrés Postraumático. La efeméride, que surge hace unos años en Estados Unidos, busca visibilizar este problema de salud que afecta la calidad de vida de millones de personas. Se trata de una patología frecuentemente infradiagnosticada, con un gran número de pacientes que no logran dar con la contención y el tratamiento que necesitan.

En el último tiempo se ha comenzado a explorar su prevalencia en el contexto de distintas situaciones clínicas. Y lo que se ha podido determinar es que las enfermedades cardiovasculares agudas, tales como por ejemplo el infarto agudo de miocardio, son capaces de desencadenar luego trastorno por estrés postraumático. Dicha complicación de la esfera mental altera notoriamente la calidad de vida de personas sobrevivientes a eventos cardíacos agudos. Además, ha sido asociada con un incremento en el riesgo (53%) de padecer un nuevo episodio cardíaco y con una mayor mortalidad dentro de los tres años de sucedido el evento inicial.

Pensar en trastorno por estrés postraumático en enfermedades cardíacas

Las enfermedades cardiovasculares constituyen la principal causa de morbimortalidad a nivel global. Y a pesar de que las estadísticas registran avances -por ejemplo, en tasas de hospitalización y número de muertes asociado a estas patologías- persisten aún como principal motivo de preocupación en el ámbito de la salud pública. En los Estados Unidos, cada año, el problema es responsable de un tercio de las muertes que suceden en el país. Dicho impacto en países de vías de desarrollo resulta aún mayor. Es por eso que un reciente artículo de revisión, en donde se analizan las características del trastorno por estrés postraumático en pacientes cardíacos, resulta de particular interés. Este fue publicado en la revista Current Cardiology Reports y lleva la firma en primer término de la Dra. Mary Princip, experta de la Universidad de Zúrich (Suiza).

Allí se comenta que los eventos cardiovasculares agudos representan situaciones potencialmente traumáticas. El riesgo de muerte, la percepción de pérdida de control y la impotencia experimentada por los pacientes, constituye un disparador de problemas que afectan la psiquis. Durante un evento agudo, al menos un 22% de los enfermos manifiestan temor intenso a la muerte. Otros estudios indican que el 70% de los pacientes experimenta ansiedad o depresión, de manera concomitante.

Pasado el episodio cardiovascular, hasta un 12% de los pacientes acusa algún síntoma relevante de trastorno por estrés postraumático durante una consulta médica. Y alrededor de un 4% logra cumplir con todos los criterios diagnósticos de la enfermedad. Por otro lado, algunas investigaciones han podido establecer el impacto que desencadenan intervenciones destinadas al tratamiento de enfermedades cardiovasculares. Alrededor de un 20% de los pacientes que reciben un desfibrilador implantable, y hasta un 30% de los niños que van a cirugía cardíaca, desarrollan luego trastorno por estrés postraumático.

¿Qué particularidades tiene el trauma de origen cardíaco?

Los eventos cardíacos agudos difieren de otros traumatismos en que la naturaleza de la amenaza se relaciona principalmente con pensamientos intrusivos orientados al futuro. Por otro lado, aquí el disparador es algo que no viene del exterior, sino del propio soma de la persona. Los pensamientos, imágenes y sensaciones, la trasladan hacia adelante y condicionan notoriamente la puesta en marcha de acciones destinadas al control de las enfermedades cardiovasculares.

Los pacientes con cardiopatías y trastornos por estrés postraumático suelen tener miedo a padecer un nuevo evento cardíaco. Pero también tienen temor a presentar alguna anomalía en el examen físico durante una consulta médica.

“Algunas sensaciones, como el aumento de la frecuencia cardíaca, la dificultad para respirar, o una respiración acelerada, son difíciles de evitar en estos pacientes y frecuentemente conducen a la interpretación errónea de daño cardíaco inminente”, comenta en el artículo la Dra. Princip.

Todo esto contribuye a que se registre una menor participación de los pacientes en consultas médicas, sesiones de actividad física, o programas de rehabilitación cardiovascular. “Irónicamente, este círculo vicioso de evitar la actividad física y el miedo a otro evento, puede aumentar el riesgo de recurrencia de la enfermedad cardiovascular”, señala la Dra. Princip.

Ayudar a los pacientes con trastorno por estrés postraumático

En el artículo se comenta que diagnosticar y tratar a estos pacientes constituye un desafío para los profesionales de la salud. Descartar el origen cardíaco de síntomas tales como falta de aire, dolor precordial, o mareos, resulta un primer paso vital. Por el momento no existen herramientas específicas para detectar la presencia del trastorno en pacientes con cardiopatías. Aunque cuestionarios más generales, tales como la Lista de verificación de Trastorno de Estrés Postraumático para el DSM-5(PC-PTSD-5), pueden ser de utilidad en el tamizaje de esta complicación.

Todavía resta conocer en profundidad los mecanismos que vinculan al trastorno por estrés postraumático con un peor pronóstico cardiovascular. A los factores previamente mencionados, se agregan otros que guardan relación con mecanismos fisiopatológicos. Incluyen disfunciones autonómicas, neurohormonales, inflamatorias y metabólicas. Por el momento, en el abordaje de estos pacientes han demostrado efectividad la psicoterapia y la terapia farmacológica. “El tratamiento debe restaurar la confianza en la función cardíaca, para mejorar la calidad de vida, el funcionamiento diario y posiblemente el pronóstico cardiovascular”, comenta la Dra. Princip en el artículo.

¡ALCANZÁ TU MÁXIMO POTENCIAL!

Te recomendamos estos cursos

Cardiología

600 horas
Curso superior de cardiología

Cardiología

250 horas
ACCSAP. Programa de Actualización en Cardiología Clínica
SEGUÍ ESPECIALIZANDOTE
Contenido exclusivo incluido en nuestros planes de estudio para enfermeros
Conocé mas sobre todo lo que incluyen nuestras membresias QUIERO SABER MÁS
Fuente/s:

Princip M, Ledermann K, von Känel R. Posttraumatic Stress Disorder as a Consequence of Acute Cardiovascular Disease. Curr Cardiol Rep. 2023 Jun;25(6):455-465. doi: 10.1007/s11886-023-01870-1. Epub 2023 May 2. PMID: 37129760; PMCID: PMC10188382.

COMENTARIOS

0 0 Votos
Calificación
guest
0 Comentarios
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios